El Gobierno recibe a Lieberman para apuntalar la Cumbre Euromediterránea

El jefe de la diplomacia española pide a su colega que Israel facilite las actuaciones de las ONG en los Territorios Ocupados
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El Gobierno recibe a Lieberman para apuntalar la Cumbre Euromediterránea
AP El ministro de Exteriores, Miguel Ángel Moratinos, ayer en Madrid con el ministro de Defensa israelí, Avigdor Lieberman
LUIS AYLLÓN | MADRID
Viernes , 23-04-10
FTE: (ABC.ES)

José Luis Rodríguez Zapatero y Miguel Ángel Moratinos mantuvieron ayer en Madrid sendos encuentros con el ministro israelí de Exteriores, Avigdor Lieberman. Considerado uno de los miembros más derechistas y duros del Gabinete de Benjamín Netanyahu, Lieberman conversó con el presidente del Gobierno durante unos 40 minutos, en La Moncloa, y asistió después a un almuerzo ofrecido por su colega español en el Palacio de Viana.
Obviamente, la situación del proceso de paz en Oriente Próximo estuvo en el centro de las conversaciones, según las informaciones facilitadas por el Ejecutivo español, ya que no hubo ninguna comparecencia ante la prensa. Al Gobierno de Zapatero le preocupa seriamente que si ese proceso no sale de su actual estado de estancamiento, la Cumbre de la Unión por el Mediterráneo,(UpM) convocada para el 7 y 8 de junio en Barcelona, pueda verse afectada.
Por eso, las autoridades españolas están haciendo grandes esfuerzos para convencer a israelíes y árabes de que acudan a la cita y de que lo hagan con un espíritu constructivo, que permita avanzar en la consecución de proyectos que beneficien a la región, por encima del conflicto.
Mal precedente
En ese sentido, no fue un buen ensayo la reunión sobre gestión del agua que se celebró igualmente en Barcelona hace un par de semanas y que no pudo poner en marcha una estrategia de cooperación entre los socios de la UpM, ante la falta de acuerdo para denominar a los «territorios ocupados» de Palestina.
Lo cierto es que sigue presente el fantasma de un fracaso de imagen como el que se vivió en la propia Ciudad Condal en el año 2005, con la cumbre del X aniversario del Proceso de Barcelona, al que no acudieron la mayoría de los gobernantes de la orilla sur del Mediterráneo.
El Gobierno confiaba en que la llegada de Barack Obama a la Casa Blanca reactivara el proceso de paz, pero lo cierto es que las relaciones entre Washington y Tel Aviv no pasan por su mejor momento, tras la decisión de Netanyahu de no detener la construcción de asentamientos judíos en Cisjordania y en Jerusalén Este. Los ojos están puestos en la llegada anoche a Israel del enviado especial norteamericano, George Mitchell, para tratar de que se reanuden las conversaciones indirectas entre israelíes y palestinos.
De este asunto hablaron zapatero y Moratinos con Lieberman, aunque no es el titular de Exteriores quien lleva directamente la cuestión, sino su primer ministro, quien, por cierto, aplazó la visita que tenía previsto hacer a España el pasado día 15.
Zapatero, según fuentes gubernamentales, instó a Lieberman a trabajar junto a Estados Unidos, la Unión Europea y los otros dos integrantes del Cuarteto -Rusia y la ONU- para lograr la reanudación de las negociaciones. El jefe del Ejecutivo añadió que «el mayor riesgo para la región es que no se avance en el proceso de paz».
Por su parte, Moratinos reclamó a su colega que el Gobierno israelí «facilite al máximo» la labor de las ONG que trabajan en los Territorios Palestinos Ocupados y que se han quejado de la decisión de Israel de dejar de expedirles visados de trabajo. Lieberman, según fuentes israelíes indicó que la nueva ley resulta más favorables para los ciudadanos de Cisjordania.
Lieberman se entrevistó también ayer con la presidenta de la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre